La Wii se hace mayor.

24 julio 2010

Después de mi desconexión digital obligada por eventos ajenos a la voluntad de este humilde ¿blogger? -también conocido como «obra que te jode el cable del teléfono de tu casa recién reformada»-, tuve a bien hacerme con un jueguecillo para la blanquita de Nintendo, la fantasbulosa WII.

El que sepa un mínimo de videojuegos, y a poco que sea algo fanboy del virtuosismo gráfico y de como se ve en la pantalla gracias a la tecnología de las consolas nextgen -PS3 y Xbox360- la perturbación que se produce en la fuerza al escapársele un pedito al protagonista marine hipermusculado, reconocerá al instante que la Wii no es una consola seria, que los únicos juegos que se sacan son juegos de masturbar el Wii Motion, que es para críos porque siempre sale Mario, que no hay marines hipermusculados, etc.

Pero hete aquí que un día Nintendo, que no tiene un pelo de tonta, decide acercarse a Capcom y preguntarle: ‘Oye, esa saga rara que tienes para PSP y que en Japón creó escuela de la buena… ¿qué hace falta para sacar una tercera parte en exclusiva para Wii?’  Negociación que te crió y se parió el que, posiblemente, sea el mejor juego ‘hardcore’ que tiene Wii hasta el momento, y muy posiblemente entre los mejores que tiene la consola de todos sus géneros.

Monster Hunter Tri es la primera apuesta seria de una third party para Nintendo Wii, que exprime como no se ha hecho antes el potencial de nuestra preciosa blanquita.

¿En qué consiste? Matar monstruos… Muchos monstruos, y muy grandes. MUY grandes. El jugador se encarna en la piel de un cazador -o cazadora, puedes elegir el sexo de tu personaje- que se dedica a limpiar de amenazas monstruosas la aldea de Moga. Armado con una plétora de armas, tanto en estilo de combate como en cantidad de las mismas dentro de cada estilo, el jugador debe ir escalando en la ferocidad y dificultad de los monstruos a cazar hasta encontrar el por qué de los terremotos que están asediando la citada aldea. Como historia es simple, muy simple, y la esencia del juego es aún más simple, dado que solo se nos requiere que cacemos monstruos. Pero habiendo cerca de 15 monstruos mayores en el juego -con mayores me refiero a que el más pequeño mide al menos 9 metros y el más grande supera de largo los 30- las habilidades que deberemos desarrollar con nuestras armas y el conocimiento de las conductas de cada monstruo te mantendrán un buen rato enganchado hasta llegar al final del juego.

En el apartado gráfico el juego está repleto de detalles que te hacen ver que no han escatimado esfuerzos en fabricar un juego virtuoso. Las texturas están correctamente realizadas y son soberbias teniendo en cuenta la potencia que desarrolla Nintendo Wii. La fluidez y variedad de movimientos que tienen cada uno de los monstruos permiten creer que, en efecto, son grandes, muy grandes, y a veces hasta muy muy duros. Por otra parte, cada monstruo tiene sus propias pautas de comportamiento y ferocidad, pudiendo comprobarse que el monstruo se cansa durante nuestros enfrentamientos, o bien se enfurece impidiendo que le ataquemos adecuadamente durante un tiempo, y obligándonos a recular para que no nos desmayemos. Los detalles que permiten comprobar que hacemos mella en su resistencia son, bajo mi punto de vista, geniales. El monstruo comienza a babear, da traspiés, cae si le golpeamos repetidamente en alguna pata o pierde alguna extremidad si le atacamos suficientes veces, y por último renquea y cojea cuando está a punto de ser vencido. La sensación de que, efectivamente, es un monstruo lo que estamos cazando está muy conseguida.

En cuanto a la jugabilidad es de agradecer que cada estilo de armas es diferente a las demás. Las tácticas y habilidades a desarrollar son muy diferente si usamos lanza y escudo a si usamos una espada grande -tan grande como 3 metros-. La estética del videojuego tiene ciertos toques japoneses de manga y ánime, y eso se traslada a las formas y texturas de armas y armaduras. Podemos elegir entre atacar cuerpo a cuerpo o usar una ballesta, con diferentes tipos de  munición.

En el apartado sonoro es donde el juego posiblemente pierda parte de su poderío. La música suele estar ausente durante nuestros paseos por los diferentes mapas, para convertirse en algo que genera más urgencia o epicidad al momento cuando nos encontramos con un monstruo mayor. Acompaña adecuadamente, pero se echa en falta más variedad de melodías. Por otra parte en cuanto a los efectos de sonido cumplen perfectamente con su cometido, permitiendo recrear bastante bien el tipo de monstruo que es y los diferentes carnívoros o herbívoros que les acompañan o pululan en las cercanías. El sonido de armas golpeando a los monstruos, siendo repelidas por su piel y escamas, además de detalles como el grito de un gran monstruo en la lejanía aumentan la inmersión del jugador en la experiencia de juego.

Pero si todo esto ya resulta suficientemente divertido durante el juego offline, se multiplica por 10 con la Conexión Wi Fi y el juego Online. El gran esfuerzo que ha hecho Capcom para ofrecer servidores gratuitos de juego online en Europa es digno de mención, permitiéndonos disfrutar de la caza con hasta 3 compañeros más en las series de misiones que nos esperan en la ciudad amurallada de Loc Lac. No contentos con poder cazar los mismos monstruos en el juego online, Capcom prepara periódicamente eventos donde poder dar caza a monstruos exclusivos del juego en línea, como el Jhen Moran o Alatreon, lo cual es de agradecer pues propicia la posibilidad de conseguir el equipo y los trozos de monstruo necesarios para armas y armaduras mejores con mayor facilidad. Suele ser una experiencia muy divertida comprobar que los golpes que tú y tus compañeros hacen mella en el monstruo, y ver que empiezan a saltar trozos del mismo -garras que se cortan, colas que se amputan, crestas que se hacen trizas- mientras lo acorralais, si se deja…

Podría realizar un análisis exhaustivo del título, pero ni mis lectores son usuarios de Wii -la gran mayoría- y los que pudieran tener la consola pocos estarían interesados en este título que invoca el espíritu del coleccionista de objetos y poder.

No obstante, si teneis la consola y teneis conexión a internet WiFi y teneis ganas de pasar un buen rato mientras trinchais un monstruo gigantesco con vuestra espada gigante, o quereis hacerlo caer como a un árbol con un martillo que os dobla en tamaño, este es vuestro juego. Y si este es vuestro juego, yo soy vuestro solícito compañero.

¡Buena caza!


Feisbuk. Que te zurzan.

5 May 2010

Soy un inadaptado digital.

Con canas en la barba, habiendo mamado informática desde los tiempos del Spectrum y el BASIC, cuando tuve mi primera consola allá por el pleistoceno -una Game Boy que me cabía en el bolsillo delantero del pantalon vaquero- y me freía las retinas con el Tetris, que me he viciado con el Mario Kart de Super Nintendo -clasicazo hasta decir basta-, que viví la fiebre del chat, del commm, del messenger, de millones de contactos y listas interminables de personas hablando todas a la vez conmigo y con otros más… Que hasta he tenido novia a distancia -de las que se palpan, tocan, besan y demás parafernalia bioquímica- por obra y gracia del internet.

Yo… No estoy en Facebook.

– «Hazte una cuenta, es divertidísimo».

– «No sabes la de gente que he reencontrado al cabo del tiempo. ¡Me ha hecho una de ilusión!».

– «Deberías probar el juego de la granja, es la repera».

– «Que levante la mano el que no ha echado un ojo a la página de facebook de sus ex…».

Todo esos placeres están vetados para mí por obra y gracia de mi negacionismo contumaz. Sé que es tremendamente adictivo, y que te permite ver fotos de tus amigos haciendo cosas tan divertidas como: tiro al pichón tetrapléjico,  cría de acelgas en pista cubierta, e ingestión de chupitos B-52 por el siempre agradable método de tirárselo a la cara.

También que es genial para volver a saber de aquellas personas tan importantes en tu vida que, pese a que habeis perdido el contacto por alguna razón -seguramente lógica y racional-, debes reintroducirlas para ‘ensanchecer’ tu experiencia vital y sentirte un todo en la aldea global.

Que si te aburres de cotillear en las fotos ajenas, y en las vidas de otros -¿alguien dijo «patio de abuelas»?-, siempre tienes la opción de convertirte en un adicto a los juegos de «haz siempre lo mismo y, si quieres, házselo a tus coleguis». Hay opciones más complejas y vistosas visualmente en el mercado…

Pero de lo que no te avisó tu colega Fermín, tu amiga Paula, y tu novia Eudovigis, es de que todo lo que cuelgas, posteas, enlazas y, al fin y al cabo, compartes dentro de tu perfil de Facebook, les pertenece de por vida, para siempre… Para siempre… Y de que darse de baja es más complicado que desaparecer de la faz de la tierra. ¿O no?.

A todos aquellos que estais contemplando la posibilidad de suicidaros de la red social por excelencia y pasar a engrosar la lista de inadaptados digitales, a la que me enorgullezco de pertenecer, os dejo esta noticia molto interesante.

Recordad, cada vez que un perfil de Facebook es eliminado, Dios mata a un gatito.


No se juega con las cosas de reir.

9 marzo 2009

¿Tendrán cosas con las que meterse esta manada de estreñidos mentales del PP? ¿Habrá asuntos que denunciar, defender, explotar, reclamar, con la de desaguisados que estamos pergeñando en la piel de toro, que se les ocurre meterse con el sentido del humor franco y sin dobleces de los «Muchachos»?  Con el culo torcido me deja la diputada ‘popular’ Dª Macarena Montesinos -en mi lista de ‘simpáticas’ vas apuntada, por salá- preguntando «¿Qué objetivos de servicio público tiene el programa ‘Muchachada Nui’?». Así, a volapié, se me ocurre uno: Hacer reir. Que buena falta nos hace.

Y es que no solo está el asunto de «qué hacen con nuestros impuestos» los programadores de RTVE, que ya bastante tenemos con ‘Mira quien baila’, que se ha ido a meter con uno de los mejores -si no el mejor- programas de humor que actualmente hay en la televisión española. Porque hay que tener mucha imaginación, y unos cojones muy bien plantados, para fabricar y producir media hora de risas y chistes de lo más freaks, y rondar cerca de un millón de españolitos delante del televisor en La 2, los miércoles por la noche a las 23.30h -no, no me paga nada Joaquín Reyes por la publicidad-.

Para botón, dos muestras:

De los Celebrities ninguno tiene desperdicio. Ninguno.

Aparte del valor que aporta este programa a la parrilla de la tele nacional existe un valor añadido por la fuerte apuesta que ha hecho RTVE al colgar todos, absolutamente todos, los contenidos del programa en Youtube. Ni copyrights, ni derechos de autor, ni tomas prohibidas por ‘el gato es mío y me lo follo cuando quiero’. Una jugada redonda aunar frikismo, programa friky, e internet, que es donde está el futuro de la agonizante televisión.

¿Que se desperdicia dinero en la televisión pública? Eso no lo pongo en duda. Pero antes de criticar a troche y moche, critiquemos lo que se conoce objetivamente, porque para derroches ya tenemos el plagio de la canción de la eurovisiva «Poyeya». Qué valiente es la ignorancia.


Suma y sigue…

4 marzo 2009

Atrás quedaron los días de mirtos y rosas que tan bien nos acogieron en este nuestro terruño patrio, donde todos los que venían aquí atraidos por las mieles del «papeles para todos», y los que no se querían mover gracias el ladrillo-mojón envuelto en bandera española, nos permitía medrar sin dar palo al agua gracias al negocio inmobiliario -de eso ya hablaré algún día-. Esos tiempos se acaban, como todos los ciclos, y nos sumergimos inexorablemente hacia las procelosas aguas del valle económico, en pro del equilibrio que todo lo rige y todo lo gobierna. Lo que sube, tiene que bajar.

Y aquí estamos, que ya sumamos casi tres millones y medio de españolitos en situación de desempleo, muy lejos de aquellas crifras que nuestro PZ auguraba como «nuestras peores cifras de empleo siempre serán mejores que las mejores del bigotes». La realidad, abofeteándonos impúdica, para ver si de una jodida vez despertamos de la modorra en la que indolentemente nos hemos aposentado. Aunque eso sí, si por las empresas fuera, nos despertarían al estilo español, no con un sonoro cachete, sino con una contundente patada en el culo. «Gracias por deslomarte cuando hacías el trabajo de dos personas, pero te puedes ir a la p*** calle para que sigamos ganando una pastaza».

Y he de decir, no sin cierto orgullo, que ya engroso las filas de la mayor empresa española. La cola del paro. Soy un desempleado más que opta a que le den su «paguica», como se dice en mi pueblo. Hoy mismo me he asomado a la oficina del Inem, llamado en nuestra Comunidad Taifónoma «Servicio Andaluz de Empleo». Una broma cínica más de lo políticamente correcto, llamar a la oficina donde el personal se apunta solo porque está desempleado y va a cobrar su subsidio de desempleo, servicio andaluz de empleo.

¿Servicio? No he sabido hasta hoy que la oficina no abre hasta las 9.00, y que se cierra a las 14.00. Esos tipos, funcionarios creo que son, están abiertos cinco horas al público. Pero como uno no lo sabía, me asomé a las 8.05 de la mañana. Cancelas echadas, luces apagadas, más abandonado que una Iglesia en pleno Madrid-Barça. Eso es, funcionarios trabajando sus siete horas. El mismo servicio que encontrarme a una señora de la limpieza limpiando a las 9.10 horas… ¿No ha tenido tiempo de limpiar entre las 8.00 y las 9.00? Sí, sí, hinchadicos de trabajar y de madrugar. El servicio de ver 3 personas en sus puestos de trabajo, uno con cara de «Dios me ampare» mientras sella las cartillas del desempleo, otra que recibe a los que quieren demandar su subsidio de desempleo y un tercer «individuo», con un cartelón gigante en medio de su mesa que decía «Sin Servicio», mientras él trasteaba con evidente entusiasmo en su ordenador. ¿Es que no ha tenido tiempo de ponerse al día entre las 8.00 y las 9.00? Santos cojones del Creador.

Pasan delante mía cuatro personas. Sellan sus cartillas y se van «hasta dentro de tres meses». A continuación me toca, saludo -respuesta cero- e indico al amable funcionario mi deseo de inscribirme como demandante de empleo. Me pide el DNI y un par de papelitos más, me pregunta de qué trabajaba y, después de señalar la mesa donde pedir mi «paguica», me arrea sin despedida alguna.

Me planto delante de una señora de cuarenta y medio años, aburrida de estar donde está con solo mirarme. Saludo y responde -vamos bien- mientras permanezco en pie. Me deja alucinado porque me ofrece asiento y agradezco el gesto exterior -e interiormente, no pensaba tanta deferencia de mi peblo-. Me vuelve a pedir los papeles variados y mi DNI, coge unos formularios, y empieza a tachar y garabatear con el dominio de alguien que tiene las manos negras de hacer siempre lo mismo. Después me observa  con su triste mirada y me explica en apenas dos minutos las condiciones previas para poder optar al subsidio de desempleo -tengo que enterarme de cual es el nombre ‘políticamente correcto’ del asunto… ¿será «devolución momentánea de prestaciones sociales en suspenso de futuro empleo»?-, emplazándome para dentro de una semana a una hora concreta en un puesto en el que no hay nadie -¿por qué no hay nadie a esa hora?- y tramitar mi subsidio. ¿Una cita? ¿Tramitar? ¿Dentro de una semana? ¿Y qué demonios está haciendo el tipejo de al lado con cara de alucine y su cartelito de «Sin Servicio»?.

Después de definir el Servicio y quedándome claro de donde viene lo de Andaluz, me quedé rumiando de donde diablos podía sacarse lo de Empleo. Hasta que me encontré con ESTO. Hummm… ¿Cuantos funcionarios están destinados, entre todas las CC.TT., a gestionar nuestros desempleos y nuestros subsidios? ¿Por qué de cada cien personas desempleadas que encuetran empleo, solamente dos lo hacen a través de las diversas oficinas del INEM y sus brazos Taifónomos? Da que pensar, al menos para cinco segundos.

P.D: Para los que esteis preocupados por mi situación. Estoy contento y satisfecho. No le busqueis tres pies al gato  porque me han liberado de una de mis jaulas. Nos vemos para celebrarlo con una CERVEZA DE LA VICTORIA.

P.D.2: Un apunte de macronúmeros. En el último año ha subido el desempleo un 50%, y se han reducido el número de filiaciones a la S.S. en 1’5 millones de personas, pero los sindicatos están callados como p***s. Que cada cual entienda lo que quiera.


¿Podrá soportar España 4.000.000 de bajas de clientes de banda ancha?

11 febrero 2009

Cerca de cuatro millones de ciudadanos no pueden acceder a la banda ancha en España en función de su sitio de residencia; a este indicador negativo para el desarrollo de la Sociedad de la Información en España, se le podrían sumar bajas masivas de clientes del ADSL más lento y caro de Europa. Las entidades representativas de la comunidad internauta, los profesionales y los consumidores informáticos en España estiman en cuatro millones la cifra de clientes de banda ancha -ADSL y cable-modem- que podrían darse de baja, si finalmente se confirma el acuerdo que RedTel las sociedades de gestión de los derechos de autor, abanderadas por la SGAE, para que en España se dé tres avisos antes de desconectar o ralentizar la conexión a Internet por usar redes P2P.

A la disminución de ingresos se sumarían las posibles indemnizaciones que podrían derivarse por incumplimiento de contrato de las operadoras y las sanciones aplicables en base a los artículos 8 (”Restricciones a la prestación de servicios y procedimiento de cooperación intracomunitario“) y 11 (”Deber de colaboración de los prestadores de servicios de intermediación“) de la Ley 34/2002, de 11 de julio, de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico, modificado por la Ley 56/2007, de 28 de diciembre, de Medidas de Impulso de la Sociedad de la Información.

Mientras las operadoras de telecomunicaciones tratan de sortear la crisis, las sociedades de gestión de los derechos de autor, intentan conseguir prebendas para las empresas productoras de contenidos tratando de convencer a todo el mundo de que el intercambio de archivos entre particulares por Internet es un acto delictivo y que supone fuertes pérdidas al sector de entretenimiento.

Sin embargo tanto la fiscalía como las sentencias dictadas establecen que el intercambio de archivos con copyright restrictivo por redes P2P no es un delito y no es punible de ninguna forma cuando se trata de archivos públicos o bajo licencias copyleft (la mayoría de los casos)

Las propias entidades de gestión de derechos de autor han reconocido en el “Informe de la industria de contenidos en España“, publicado por ASIMELEC, que no hay una bajada de ingresos en el sector y que solo la música tiene un retroceso en la venta a través del canal tradicional (aunque no se informa del aumento de ingresos por, entre otros, actuaciones en directo, descargas y publicidad)

Lo cierto es que las negociaciones que se están llevando a cabo bajo el auspicio del Ministerio de Cultura, pueden suponer que algunas de las empresas más solventes y con mayor capacidad tecnológica de España empiecen a perder clientes a marchas forzadas. Lo que repercutirá en su cuenta de resultados y en su capacidad de mantener el empleo.

Pero lo más grave es que un acuerdo de esta naturaleza atenta contra la libre competencia, frena en seco el acceso a la Sociedad de la Información en España menoscabando los derechos civiles de los ciudadanos y alejando aún más el derecho constitucional de acceso a la cultura y al conocimiento.

Firmado: Ameba Sapiens Sapiens y 978 firmas más (por el momento).  Pon la tuya publicando el texto en tu blog.


Cocina creativa.

30 diciembre 2008

En estos días de amor, fraternidad, paz, buenos deseos y la madre que nos parió -con perdón-, nunca está de más el regalarnos con una opípara cena rodeados de nuestros seres más queridos y entrañables. Surtir una mesa con los manjares que nos ofrece la Madre Tierra y el Padre Mar es una alegría difícilmente comparable con una victoria del Barça o un beso en los morros de nuestro amante de turno -ambos eventos sujetos a la volatilidad de lo que se viene y quién sabe si volverá-. Además, si alegramos las viandas con una presentación exquisita, el gusto puede ser supino.

Pero la crisis. Dichosa crisis. Que planea sobre todos con sus amargas alas y nos arrebatan la exquisitez. ¿Nos arrebatan…? ¡No! Os voy a demostrar que todos, sin excepción, podemos disfrutar de las delicias marinas, solo aptas para bolsillos rumbosos, sin tener que empeñarnos el otro riñón en el proceso.

De primero podemos empezar con unas deliciosas vieiras. Crudas, como tiene que ser, regadas por un buen vino blanco.

vieiras2

A continuación, podriamos continuar con unas nécoras. Una por cabeza debería bastar, ¿no creeis?

necoras-cenital

Y por último, para los estómagos de amplias cavernas y paladares menos saciables, podriamos terminar con una deliciosa langosta.

langosta-frontal

El que no come bien, o con imaginación, es porque no quiere. ¡Feliz Nochevieja!


Jamón de pata hispalense

8 diciembre 2008

Es de sobra conocido entre mis amigos que siento un profundo y absoluto asco ante el cine español. Salvo alguna honrosa y nada común excepción -Airbag, el día de la bestia, Tesis-, entiendo y asumo que el cine español se ha estancado, para nuestra desgracia y la de nuestros bolsillos, en la guerra civil, problemas marginales, putas y maricones.

Ojo, no estoy diciendo que no se puedan hilvanar buenas historias con esos mimbres, pero lo que si que nos queda claro es que parece que aquí no hay redaños para hacer cine de verdad. El laberinto del fauno es un peliculón, pero tenía que ser de un director no español. Y así podría seguir.

Bajo mi punto de vista, nuestro cine está anquilosado e hipertrofiado. Se ruedan 100 películas al año de las que apenas vemos 20 ó 30 en los cines españoles. Aunque eso se arregló no hace mucho por nuestro Gobierno. Hay que alimentar tantas bocas cineastas, aunque las salas pierdan dinero o se coman las patas como los pulpos.

http://www.cincodias.com/articulo/empresas/salas-boicotearan-cuotas-cine-espanol-cambia-proyecto-ley/20070314cdscdiemp_30/cdsemp/

Pero este post va de algo más amable. Uno de mis colaboradores y amigos de especial catadura me recomendó hace dos días que me viera un corto que han hecho cuatro tipos sevillanos. Yo, con mis antecedentes, es evidente que lo vi de mala gana porque ya me estaba oliendo la españolada. La historia es otra historia marginal más que ha costado 40 € rodarla. Y hasta aquí puedo leer…

Disfrutadla.

www.malviviendo.com